VARIOS - GOLDEN MEMORIES (THE SOUND OF THE SWINGING LONDON) VOL. 4

TRACKLIST

Londres pasó de ser una capital recatada y anticuada a convertirse en el centro de moda del mundo moderno y luego retrocedió. Los años cincuenta fueron París y Roma. Los setenta, California, Miami y Nueva York. Pero los sesenta, eso fue el Londres del swing, el lugar donde comenzó nuestro mundo moderno. Casi ninguno de los elementos era único: antes había habido revoluciones bohemias y renacimientos económicos y nuevas oleadas en las artes, la cultura popular y el estilo de vida. Incluso hubo otros momentos en que la juventud dominó la escena: la era del jazz de los años veinte, el breve apogeo del rock 'n' roll de los años cincuenta. Pero en Londres, durante esos pocos años efímeros, todo se unió: juventud, música pop, moda, celebridades, sátira, crimen, bellas artes, sexualidad, escándalo, teatro, cine, drogas, medios de comunicación: todo el loco guiso moderno. 

No fue la cultura juvenil lo que Inglaterra inventó: desde James Dean hasta Levi's y Elvis, eso fue América de cabo a rabo. Pero mientras que la cultura oficial estadounidense de finales de los años cincuenta había logrado reprimir los impulsos expresivos de los jóvenes, Inglaterra los abrazó como una forma de salir de décadas (quizás siglos) de letargo. Les permitió crecer, unirse, pavonearse. Londres fue el lugar donde la cultura juvenil finalmente consolidó su dominio sobre todas las formas de expresión y se hizo conocer de manera ruidosa y exuberante. La juventud, que en un tiempo fue algo que perduraba, se transformó en el lapso de unos pocos años de sensaciones británicas en una valiosa forma de moneda, la fuente del gusto y la moda, la única edad, aparentemente, que importaba. Los británicos que crearon el Swinging London fueron únicos en su capacidad de resistencia, su capacidad para absorber y transformar elementos de la cultura estadounidense y continental y la arrogancia con la que hicieron alarde de su invención de sí mismos.

El Londres vibrante de los años 60, ese breve lapso mágico entre los primeros chillidos de la Beatlemanía y la carroza del muerto de Brian Jones de los Rolling Stones, cuando la música pop, la fotografía, la moda y la fiesta se combinaron químicamente y estallaron en lo que Tom Wolfe podría llamar una Explosión de Felicidad... Después de la larga austeridad de posguerra y la húmeda conformidad, Gran Bretaña necesitaba una liberación social y un despegue cultural.

Extraído de https://msmokemusic.com/blogs/mind-smoke-blog/posts/6300340/swinging-london-a-moment-in-time