LORIN MAAZEL CONDUCTING ORCHESTRE NATIONAL DE FRANCE - OFFENBACH/SAINT SAEZ/DUKAS

TRACKLIST

Si algo destacaba en Maazel a diferencia de muchos colegas suyos de generación (Abbado, Haitink, Masur, Mehta, Dohnányi, Mackerras, Davis...), era una formación integral, completísima y que iba mucho más allá de la música. Era capaz de combinar la dirección orquestal con la composición o con interpretaciones al violín. Quizá pesaba, en este sentido, la tradición judía que llevaba a sus hombros. Un judaísmo, por cierto, que no le impidió dirigir óperas de Richard Wagner en el Festival de Bayreuth: fue, de hecho, el primer director norteamericano en meterse en el mítico foso del Festspielhaus alemán (1960).

Las orquestas de Cleveland, de la Ópera de Viena, la Sinfónica de la Radio Bávara, la Filarmónica de Nueva York o la Sinfónica de Pittsburgh fueron algunas de las formaciones ante las cuales Maazel pudo sobresalir. Una mente prodigiosa y una extraordinaria sensibilidad, unidas a unos planteamientos analíticos -fruto de su condición de matemático-, daban pie a direcciones aplaudidas por público y crítica, gracias al sonido redondo y compacto que extraía de sus músicos y a un gesto claro, enérgico, exigente y carismático.

Por otra parte, Maazel era conocido por ser un matemático excelente, capaz de demostrar, como Pitágoras, que la música y las ciencias exactas tenían muchos puntos en común. O la filosofía, disciplina en la que, como las matemáticas, se formó Maazel en la Universidad de Pittsburgh. Esta condición hizo de él un hombre de gran formación cultural, políglota e interesado por todos los campos del saber. 

Francés pero criado en USA aquí dirige a la orquesta Nacional de Francia en lúdicas interpretaciones.