SINÉAD O´CONNOR - I DO NOT WHAT I HAVEN´T GOT

$10.000

Sello: CHRYSALIS 105629
Formato: Cinta, Cassette
País: CHILE
Edición: 1989
Género: POP ROCK
Estilo: Vocal, indie rock
ESTADO DEL PRODUCTO
Caja : Impecable
Casete: Impecable
Cover : Impecable
Cinta : Impecable

Estado: CASI NUEVO
Detalles:
Sello: CHRYSALIS 105629
Formato: Cinta, Cassette
País: CHILE
Edición: 1989
Género: POP ROCK
Estilo: Vocal, indie rock
ESTADO DEL PRODUCTO
Caja : Impecable
Casete: Impecable
Cover : Impecable
Cinta : Impecable

TRACKLIST

A1

FEEL SO DIFFERENT

 

A2

I AM STRETCHED ON YOUR GRAVE

 

A3

THREE BABIES

 

A4

THE EMPEROR'S NEW CLOTHES

 

A5

BLACK BOYS ON MOPEDS

 

B1

NOTHING COMPARES 2 U

 

B2

JUMP IN THE RIVER

 

B3

YOU CAUSE AS MUCH SORROW

 

B4

THE LAST DAY OF OUR ACQUAINTANCE

 

B5

I DO NOT WANT WHAT I HAVEN'T GOT

 

El genio de Minneapolis compuso el mayor éxito en la carrera de O'Connor, Nothing Compares To You, pero ambos sólo coincidieron un par de veces. Según la cantante, Prince la invitó a su casa en 1990, cuando el single alcanzó el número 1 en todo el mundo, y no congeniaron demasiado bien. “Me dijo que no le gustaba que dijese palabrotas en mis entrevistas, así que le mandé a tomar por culo”. Sinéad cuenta que tuvo que huir de la casa del cantante a las 5 de la mañana porque “se puso bastante violento y empezamos a insultarnos”. Prince negó esta historia y Sinéad concluyó su relato describiéndole como “un tipo monono”.

Aunque durante su adolescencia había pasado temporadas en reformatorios y en sus canciones denunciaba la injusticia social y reivindicaba la identidad irlandesa, el mundo entero asociaba a Sinéad con la imagen frágil y romántica de Nothing Compares To You. Aquel videoclip con un primer plano de O'Connor derrumbándose entre lágrimas se convirtió en un icono inmediato y la belleza de la cantante, similar a la de otro mito de la época como Winona Ryder, tenía esa delicadeza que tanto atraía a la Generación X. Pero Sinéad no era ninguna damisela en apuros.

La cantante ha hablado abiertamente acerca de los abusos que sufrió de pequeña por parte de sus padres. La muerte de su madre (con quien no se hablaba) en un accidente de tráfico en 1985 atormentó a Sinéad durante años y las lágrimas del videoclip de Nothing Compares To You caen justo cuando canta el verso “all the flowers that you planted, mama, in the backyard / they all died when you went away” (todas las flores que plantaste en el jardín, mamá, murieron cuando te fuiste).

El álbum que convirtió a Sinéad O'Connor en una estrella llevaba el proverbial título I Don't Want What I Haven't Got (no quiero lo que no tengo)

El periodista musical, Fernando Neira, lo define como “una conmoción”. “Sus dos primeros discos siguen siendo muy sólidos y en aquel momento nadie hablaba de ella como una mujer conflictiva, sino temperamental”. Había mucho dolor detrás de ese temperamento y Sinéad O'Connor ha acabado contradiciendo la sentencia que titulaba su álbum de más éxito: lleva años sufriendo justo por todo lo que le han arrebatado y ha tenido que sacrificar y hoy, la que fue emblema del amor perdido, es otro tipo de icono. Uno que nos recuerda que detrás del melodrama, la polémica y el entretenimiento siempre hay seres humanos. Pero el espectáculo debe continuar, y no parece tener problemas en dejar a Sinéad atrás.

Extraído de https://elpais.com/elpais/2016/05/17/icon/1463501273_116062.html